Sinceramente, no me imagino esa situación y a pesar de que mi hija mayor también se fue de la casa (a solo 2 km de aquí), pero se fue, realmente debe ser muy duro esta experiencia. Admiración y respeto, por la valentía de tu hija, y que le hayas apoyado en todo y ahora, más aún. Sé que es doloroso, pero debemos aceptar de que no son nuestros y deben volar. Créeme, de que si sembraste semillas fértiles en su corazón, volverá para abrazarte con el alma.
No sé si estoy viejo o más maduro, pero me llego tu historia.
Feliz día y gracias por estar por aquí.
Saludos.