Un pequeño príncipe llama la atención de todos, el primer hijo, el primer nieto, todos querían un pedacito del pequeño Ignacio. pero el tenía sus propios planes, a pesar de ser tan pequeño el contenía un pequeño secreto, le encantaba las llamas.
Cualquiera pequeña vela prendida llamaba su atención. Todos pronto descubrirían la causa de los pequeños incendios encontrado en toda la casa.
Simplemente no lo podían creer.
Había heredado las mañas del abuelo paterno. Ignacio hacia acople con su nombre era una ignitor del dios fuego.
Invitando a participar @numa26 y @carolinacardozo