Saludos:
Antes que nada, cordiales saludos a toda la comunidad de #Holos&Lotus. Hoy me encuentro participando en la invitación que nos hace el compañero @emiliorios, donde nos convoca a participar en la iniciativa número 18 del séptimo día, donde coloca un tema, un tema bien interesante y nos pide que seamos sinceros en nuestra exposición.
Realmente creo que el tema está muy bien planteado, debido a que, efectivamente, todos sentimos miedo a los cambios, más cuando estamos en medio de un estado de confort, que nos da seguridad y estabilidad. Por lo tanto, cuando muchas veces se nos ofrece la oportunidad o la necesidad de hacer un cambio, siempre nos escondemos en nuestros miedos y nuestras dudas, y muchas veces se busca la opinión de terceras personas, que de alguna u otra forma justifique nuestra forma de pensar.
Así que efectivamente, asumimos estas tres posturas, descritas de manera muy sencilla y amigable por parte de quien nos convoca en su post:
- De por si somos negativos.
- Optamos por la inamovilidad.
- Cuando el miedo nos detiene.
Ahora bien, si es cierto que lo que se plantea en ese post es una realidad, también es cierto, que cuando decidimos romper con los patrones y las “seguridades” establecidas por nuestro ego y por nuestro estado de confort, nos embarcamos a iniciar una aventura interesante y llena de expectativas, que puede cambiarnos la vida de una manera positiva.
En este punto, me gustaría plantear mi idea a través de una experiencia personal que de hecho estoy viviendo ahora y que creo abarca ampliamente todo lo expuesto en post dela convocatoria.
La experiencia:
A mí hace poco se me presentó una situación, en la cual debía decidir entre seguir en un trabajo estable, con comodidades, pero con una alta responsabilidad y personal a mi cargo a nivel nacional, o terminar enfermo, debido al nivel de enfrentamiento que había con ciertas decisiones totalmente erradas en el ámbito de mi profesión, además del de estar enfrentándome a diferentes personas que protegían a personas realmente ineptas, por el simple hecho de pertenecer a un grupo político.
Y tanto mi grupo de amigos más cercanos, al igual que mi pareja en ese momento y mi familia, sabían la situación que estaba viviendo en el trabajo, y su recomendación siempre era, quédate en el trabajo, es una gran empresa del Estado, es sólida, tienes enormes beneficios, además estás trabajando desde joven y te falta muy poco para cumplir con los años para la jubilación y te la van a dar siendo todavía un chamo y saliendo con un cargo de gerente nacional, piensa la estabilidad, la familia, las comodidades, y pare de contar.
Sin embargo, a nivel personal me sentía muy incómodo, además de sentirme muy explotado, por personas que tenían cargos de gerentes generales en áreas críticas, pero que no tenían ni idea de lo que estaban haciendo, ya que la mayoría de esos cargos, eran cargos políticos.
Así que la empresa funcionaba a través de direcciones que le eran dadas a los gerentes generales, estos no las pasaban a los gerentes nacionales o de línea, quienes las implementábamos y sosteníamos el funcionamiento de la empresa junto con el resto del personal, mientras que los gerentes generales, las presidencias y las vicepresidencias, se encargaban de manejar los presupuestos y todo lo que ello conlleva.
Efectivamente, yo deseaba irme, pero me venían dudas y pensamientos negativos, ya que mi empresa quebró, venía muy mal antes de la pandemia, pero la pude sostener, hasta que llegó la pandemia, en ese momento tuve que cerrar las puertas, y recordaba los meses de escasez económica y todas las situaciones que pasé en esos momentos.
Así que cada vez que le planteaba a los amigos o mi pareja, que debía irme, venían de nuevo con el cuento de la estabilidad, la seguridad económica y el estatus, que daba el cargo. Y eso, unido al miedo de pasar por situaciones de dificultad económica nuevamente, siempre me impedían dar el paso.
Un día en el trabajo, se presentó un problema con un trabajador. Cuando estaba hablando con él para ayudarlo en la situación, le dije una frase que me di cuenta de que era para mí mismo y fue la siguiente: “Jamás, vas a poder dar respuesta a la situación, ya que no crees en ti mismo, ni en tus capacidades y siempre estás esperando el visto bueno de un tercero para actuar.”
Después de decirle eso, me di cuenta de que hablaba de mí mismo, me di cuenta del miedo que tenía a cambiar, me di cuenta de cómo en medio de toda la incomodidad que se generaba por el ambiente político y de dirección, yo estaba en un estado de confort y con unas comodidades enormes y que además, buena parte de esas comodidades, las trasladaba a mi pareja y mi familia, y, por lo tanto, cualquier planteamiento de cambio que discutiera con ellos sería mal recibido o por lo menos recibido con preocupación.
Así que decidí, en ese momento, que el miedo al cambio no me podía detener y decidí irme. Hablé con mi familia, les expliqué y al final estuvieron de acuerdo; de hecho, mis padres me dijeron que me preferían desempleado a enfermo. Y eso, lo dijeron, ya que me había enfermado de manera seguida en los últimos meses, y en lo personal creo que esas situaciones de salud, eran un reflejo psicosomático derivado de mi situación laboral.
En fin, decidí irme, y cuando me fui, la salida de la empresa me trajo problemas con mi pareja, y me di cuenta de que la relación con mi pareja, era una de las situaciones que no me deja avanzar en la vida, así que decidí terminar la relación laboral y sentimental al mismo tiempo.
De verdad, pensé que me iba a sentir muy mal y deprimido, pero me di cuenta de que el trabajo no me hacía falta, que podía emprender y producir de otras formas y maneras y al salir de ahí, fue lo que hice hasta la actualidad.
En cuanto a la relación de pareja, me di cuenta de que si es cierto que la quería y mucho, ya no estaba enamorado de ella, y que lo que me afectaba más era el sentimiento de costumbre de tenerla cerca, pero realmente después de una semana me sentía realmente libre y sin cargas, sentía que había eliminado un enorme peso de mi vida y que había soltado un lastre que no me dejaba avanzar.
Finalmente, debo decir, que uno debe enfrentarse así mismo constantemente y romper con los estados de confort permanentemente, ya que estos nos llevan a un mundo de fantasía, donde nos sentimos completos, seguros y estables, cuando en realidad estamos navegando en una burbuja de jabón, que en cualquier momento puede reventar.
Los cambios, las salidas de los estados confort, la ruptura de la monotonía con la pareja, nos ayudan a crecer y fortalecer las relaciones. Hay que mantenerse activo, productivo, sano y cuando uno está en pareja enamorado.
Si no logramos hacerlo, la comodidad y la costumbre se harán los dueños de nuestra vida y dominarán nuestra existencia, robándole todo el tuétano, toda su esencia maravillosa y la alegría que ella nos da.
Gracias por leerme.
To Read in English
Releasing ballast.
Greetings:
First of all, warm greetings to the entire #Holos&Lotus community. Today I am participating in the invitation made by comrade @emiliorios, where he invites us to participate in the initiative number 18 of the seventh day, where he places a topic, a very interesting topic and asks us to be sincere in our exhibition.
I really think that the topic is very well posed, because, indeed, we all feel afraid of changes, especially when we are in the middle of a state of comfort, which gives us security and stability. Therefore, when we are often offered the opportunity or the need to make a change, we always hide in our fears and our doubts, and often we seek the opinion of third parties, which in one way or another justifies our way of thinking.
So effectively, we assume these three positions, described in a very simple and friendly way by the one who summons us in his post:
- In case we're negative.
- We opted for immobility.
- When fear stops us.
Now, if it is true that what is raised in that post is a reality, it is also true that when we decide to break with the patterns and the “securities” established by our ego and by our state of comfort, we embark on an interesting adventure full of expectations, which can change our life in a positive way.
At this point, I would like to propose my idea through a personal experience that I am actually living now and that I think broadly covers everything exposed in post dela convocatoria.
The experience:
I recently had a situation, in which I had to decide between continuing in a stable job, with comforts, but with a high responsibility and personal charge at the national level, or ending up sick, due to the level of confrontation that there was with certain totally wrong decisions in the field of my profession, in addition to being facing different people who protected really inept people, for the simple fact of belonging to a political group.
And both my group of closest friends, as well as my partner at that time and my family, knew the situation I was living at work, and their recommendation was always, stay at work, it's a big State company, it's solid, you have huge benefits, you're also working from a young age and you have very little time to meet the retirement years and they're going to give it to you while still a chamo and leaving with a national manager position, think stability, family, amenities, and stop counting.
However, on a personal level I felt very uncomfortable, in addition to feeling very exploited, by people who had positions of general managers in critical areas, but who had no idea what they were doing, since most of those positions were political positions.
So the company worked through addresses that were given to the general managers, they did not pass them on to the national or line managers, who implemented them and supported the operation of the company together with the rest of the staff, while the general managers, the presidencies and the vice-presidencies, were in charge of managing the budgets and everything that entails.
Indeed, I wanted to leave, but doubts and negative thoughts came to me, since my company went bankrupt, it was very bad before the pandemic, but I was able to sustain it, until the pandemic arrived, at that moment I had to close the doors, and I remembered the months of economic shortage and all the situations I went through at those moments.
So every time I told my friends or my partner that I should leave, they came back with the story of stability, economic security and status, which the position gave. And that, together with the fear of going through situations of economic difficulty again, always prevented me from taking the step.
One day at work, there was a problem with a worker. When I was talking to him to help him in the situation, I told him a phrase that I realized was for myself and it was the following: “You will never be able to respond to the situation, since you do not believe in yourself, nor in your abilities and you are always waiting for the approval of a third party to act.”
After telling him that, I realized that he was talking about myself, I realized how afraid I was to change, I realized how in the midst of all the discomfort that was generated by the political and management environment, I was in a state of comfort and with enormous comforts and that in addition, a good part of those comforts, I transferred them to my partner and my family, and, therefore, any approach to change that I discussed with them would be poorly received or at least received with concern.
So I decided, at that moment, that the fear of change could not stop me and I decided to leave. I talked to my family, explained to them and in the end they agreed; in fact, my parents told me that they preferred me unemployed to sick. And that, they said, since I had been sick a lot in recent months, and personally I think that these health situations were a psychosomatic reflection derived from my work situation.
Anyway, I decided to leave, and when I left, the departure of the company brought me problems with my partner, and I realized that the relationship with my partner, was one of the situations that does not let me move forward in life, so I decided to end the working and sentimental relationship at the same time.
Really, I thought I was going to feel really bad and depressed, but I realized that I didn't need work, that I could undertake and produce in other ways and forms and when I got out of there, that's what I did until today.
As for the couple's relationship, I realized that if it is true that I loved her and a lot, I was no longer in love with her, and that what affected me the most was the usual feeling of having her close, but really after a week I felt really free and unburdened, I felt that I had eliminated a huge weight from my life and that I had released a ballast that did not let me move forward.
Finally, I must say, that one must constantly face oneself and break with the states of comfort permanently, since these take us to a fantasy world, where we feel complete, safe and stable, when in reality we are navigating in a soap bubble, which at any moment can burst.
The changes, the exits of the comfort states, the break of the monotony with the couple, help us to grow and strengthen the relationships. You have to stay active, productive, healthy and when you are in love as a couple.
If we fail to do so, comfort and habit will become the masters of our life and will dominate our existence, robbing it of all its marrow, all its wonderful essence and the joy that it gives us.
Thanks for reading me.