Hola amiga bella, si estaba preciosa la Virgencita.
Y la verdad que escuchar la palabra de Dios es reconfortante, aunque muchas veces te jale las orejas, jejeje.
Bendecida semana.
Hola amiga bella, si estaba preciosa la Virgencita.
Y la verdad que escuchar la palabra de Dios es reconfortante, aunque muchas veces te jale las orejas, jejeje.
Bendecida semana.