Hola. Lamento su perdida. Se que es difícil, creamos vínculos con seres especiales y eso hace da magia a nuestra vida. Cuando ya no están se nos hace complejo adaptarnos a nuevas rutinas. Al final vale mucho lo que disfrutamos junto a ellos.
Por otro lado, la leía y pensaba en varias cosas. Una es que si nos dejamos mover de nuestros principios estamos en peores condiciones para enfrentar la vida . Por tanto, concuerdo con usted en cuanto a la importancia de no devolver odio por odio. Es difícil, somos seres que sentimos pero creo que ayuda mucho saber quién soy y que espero de la vida para entonces entregar la energía correcta.
Desde otra perspectiva, cuando nos movemos hacia el estado emocional de otro (un estado disfuncional, me refiero) estamos entrando a un "combate" con las armas del otro, no con las de nosotros. Tenemos más posibilidades de perder. Perder tranquilidad, autoestima, etc. Al final estoy dejando de ser yo.
Cuando permito que los estados emocionales de alguien dominen ls míos entonces estoy a merced de las influencias externas.
Sus palabras también me recordaron al Aikido. Ese arte marcial se basa en utilizar a nuestro favor la fuerza del golpe de nuestro oponente. Si quien nos agrede no encuentra una energía similar a la suya, queda desarmado. Creo que a eso se refiere también la biblia cuando habla de "poner la otra mejilla".
Excelente post! Que tenga buen día.