𝐇𝐨𝐲 𝐞𝐬 𝐣𝐮𝐞𝐯𝐞𝐬, «𝐞𝐥 𝐜𝐮𝐞𝐫𝐩𝐨 𝐥𝐨 𝐬𝐚𝐛𝐞», 𝐞𝐥 𝐝𝐢́𝐚 𝐝𝐞𝐥 𝐓𝐁𝐓. El tiempo pasa aceleradamente y lo vemos en las nuevas generaciones, tan activas, como «La Grilla». A ver si atrapo su curiosidad.
Definitivamente incansable, así es mi ahijada quien el pasado domingo hizo La Primera Comunión. Es que nueve años han pasado tan rápido desde que Génesis nació. No estuve de acuerdo con el nombre de «Génesis», porque ella es la segunda hija de mis compadres, a la primera le llamaron Daniela.
La generación nacida desde 2010 en adelante se conoce como Generación Alfa. Estos niños son nativos digitales al 100%, lo que significa que han crecido en un mundo donde la tecnología y las pantallas son parte integral de sus vidas. Estos pequeños han crecido con el ejemplo de padres siempre conectados a dispositivos electrónicos. Desde temprana edad, están familiarizados con la tecnología y la utilizan de manera natural.
Por extraño que parezco, la generación de hoy desconoce el mundo analógico, les cuesta comprender por ejemplo el reloj de agujas. Pueden confundir una mancha de café con una mancha de sangre o no entender cómo funcionan ciertos objetos no digitales. Pero, son autodidacta, gracias al Internet, los Alfa tienen acceso a una gran cantidad de información. Yo diría que esta generación es «sobreinformada», Están expuestos a una gran cantidad de información desde muy temprana edad. Esto puede ser tanto una ventaja como un desafío, ya que deben aprender a filtrar y evaluar la información que encuentran; es allí, donde los padres y la escuela desempeñan un papel muy importante.
Así es Génesis, una niña despierta, incansable, "todo lo sabe" pegada a su Tabla. Fue entonces cuando sus padres desde pequeña le empezaron a decir "La Grilla" y así se quedó.
En un mundo donde los niños de la generación alfa parecen tener baterías infinitas, sus risas resuenan como el chisporroteo de una vieja radio de válvulas (ellos no saben que es eso). Sus ojos, centelleantes y curiosos, exploran cada rincón del universo digital con la misma intensidad que un explorador en busca de tesoros olvidados.
¿Incansables? Sí, pero también son como pequeños cometas que cruzan el cielo nocturno, dejando estelas de risas y travesuras a su paso. Sus risueños corazones que laten al ritmo frenético de un algoritmo impredecible. Sus pies, ligeros como píxeles, saltan de una aventura a otra. Así describo a Génesis, como un grillo que no para de saltar.
Quizás, en su hiperactividad, encuentren la clave para descifrar los misterios del código fuente de la vida. Porque, al final del día, son los soñadores, angeles en su camas tiernamente arropados. Génesis es un amor, y a mi hijo Matthew, le chisparrotean los ojos cuando hablamos de ella.
Si quieres participar, me parece que aún estás a tiempo, tienes hasta las 11:59 pm de HOY JUEVES, así que apúrate y recuerda cumplir las reglas.
ℂ𝕠𝕟𝕔𝕦𝕣𝕤𝕠 𝕕𝕖 𝕋𝔹𝕋 - 𝕌𝕟 𝕕𝕚́𝕒 𝕕𝕖 𝕖𝕤𝕠𝕤.
A ver si se animan, el amigo @tiffanny, @faniaviera y @silher…
CRÉDITOS
Imagen de mi propiedad, tomada en diciembre 2022.
Arte del título: CoolText