Es algo que sabemos, la vida no es toda color de rosa, eventualmente nos sentimos abatidos por diferentes circunstancias y necesitamos ingeniárnoslas para salir adelante. En muchas ocasiones requiere toda nuestra fuerza de voluntad, levantarnos y continuar el camino que debemos recorrer.
En la publicación: Esa Vida Nuestra / Iniciativa 19/ Estrategias para el bienestar., @charjaim nos invita a compartir, en otras palabras: ¿Cuáles son esas estrategias que aplicamos en nuestros momentos difíciles? ¿Qué hacemos para superarlos?
Agradezco a charjaim por esta iniciativa, que nos ayudará a aprender unos de otros y quizás a redefinir nuestra manera de enfrentar las adversidades; a su vez, deseo invitar a @purrix y a @ambarprincess a participar.
Es algo natural, podemos estar muy alegres y optimistas, en un escenario en el que todo parece estar de maravilla, incluso animando a quienes atraviesan una tormenta, asegurándoles que todo pasa, que deben seguir adelante y, de repente, algún giro inesperado nos coloca en la posición de ya no querer levantarnos, sin que podamos preverlo.
Otras veces, alguna causa que no es novedad y que hemos sabido manejar, un día cualquiera, ya no la toleramos más y sentimos que no podremos superarlo.
En ocasiones, sólo una gota nos desborda y aunque a primera vista parece algo irracional, es el resultado que haber estado guardando muchas otras gotas.
Pero la cuestión aquí es ¿Qué es lo que hago cuando el desánimo me atrapa?
Noto que no estoy bien, cuando no me quiero levantar de la cama, es como si quisiera dejar pasar la vida y no hacer nada. Cuando mis hijos eran pequeños, no podía darme ese lujo, por más que me sintiera derrumbada, ellos dependían de mí y estar en cama, no era una opción. Es cuando una motivación externa nos mueve, aún en contra de nuestra voluntad.
Ahora que ya son adolescentes, ya puedo descansar mucho más, es entonces cuando mi fuerza de voluntad es mi mejor aliada.
Algunas veces me pasa que me siento triste sin alguna razón aparente, no es que todo esté bien, es que aún en ese escenario, me las he arreglado para tener una actitud constructiva y de agradecimiento.
Es como cuando aún sabiendo todas las cosas malas que suceden en el mundo, nos atrevemos a ser felices, porque a fin de cuentas, no tenemos el control de todo y no creo que nuestro propósito de vida sea unirnos al sufrimiento colectivo. De hecho, es un tema en el que no me gusta pensar, porque se escapa de mi limitado entendimiento. Un día simplemente acepté que no gano nada sintiéndome mal por todo.
En fin, para dar el salto adelante cuando no quiero hacerlo, me ayuda lo siguiente:
1.- Pienso que la manera en que me siento en ese momento es temporal, que todo siempre pasa y que ésa no es la excepción, me enfoco en todo lo bueno que tengo en mi vida e intento mantener mis pensamientos allí. También pienso que hay muchas personas en peor situación y con mejor actitud, así que no debería dejarme abatir. Todo esto me hace cambiar la perspectiva de mi situación de colosal a pequeña.
2.- Me obligo a levantarme de la cama y luego me pongo a escuchar música alegre, parece algo tonto, pero la música adecuada me alivia, incluso me llena de energía y me devuelve la sonrisa.
3.- Me ocupo en algo constructivo, por ejemplo, a mí me funciona ponerme a limpiar y ordenar la casa, porque siempre cuando termino, me gusta el resultado y me hace sentir bienestar.
4.- Salgo a caminar al aire libre, estar frente al mar es lo que más me tranquiliza, pero ahora que no lo tengo cerca, también disfruto la vegetación. El contacto con la naturaleza me revitaliza, además, el ejercicio físico nos hace segregar hormonas que nos brindan la sensación de felicidad.
Creo que en todo caso es importante mantener la objetividad, pensar que nada ganamos con desgastarnos en pasar más tiempo del necesario resintiendo algo que no tiene remedio, ya sea porque ya pasó o porque está fuera de nuestro control.
El tiempo no se detiene y es limitado, es mejor intentar ser felices tanto como podamos ¿Fácil? No tanto, sin embargo, hacer lo que sea más razonable y más saludable, siempre será la mejor opción.
Cuando sabemos qué está bien y qué esta mal, al menos podemos elegir con conciencia qué camino tomar, independientemente si tenemos ganas o no.
Por haberme acompañado en esta lectura:
ENGLISH VERSION
It is something we know, life is not all rosy, eventually we feel down for different circumstances and we need to figure out how to get ahead. In many occasions it requires all our willpower, to get up and continue on the road we must travel.
In the publication: Esa Vida Nuestra / Initiative 19/ Strategies for wellness, @charjaim invites us to share, in other words: What are those strategies that we apply in our difficult moments? What do we do to overcome them?
I thank charjaim for this initiative, which will help us learn from each other and perhaps redefine our way of facing adversities; in turn, I would like to invite @purrix and @ambarprincess to participate.
It is something natural, we can be very cheerful and optimistic, in a scenario in which everything seems to be wonderful, even encouraging those who are going through a storm, assuring them that everything passes, that they must go on, and suddenly, some unexpected turn puts us in the position of no longer wanting to get up, without us being able to foresee it.
Other times, some cause that is not new and that we have known how to handle, one day, we can no longer tolerate it and we feel that we will not be able to overcome it.
Sometimes, just one drop overflows us and although at first glance it seems irrational, it is the result of having been saving many other drops.
But the question here is: What do I do when discouragement catches me?
I notice that I'm not well, when I don't want to get out of bed, it's as if I want to let life go by and do nothing. When my children were small, I could not afford that luxury, no matter how much I felt down, they depended on me and being in bed was not an option. It is when an external motivation moves us, even against our will.
Now that they are teenagers, I can rest a lot more, that's when my willpower is my best ally.
Sometimes it happens to me that I feel sad for no apparent reason, it is not that everything is fine, it is that even in that scenario, I have managed to have a constructive and grateful attitude.
It's like when even knowing all the bad things that happen in the world, we dare to be happy, because at the end of the day, we are not in control of everything and I don't think our purpose in life is to join the collective suffering. In fact, it's a subject I don't like to think about, because it escapes my limited understanding. One day I simply accepted that I have nothing to gain by feeling bad about everything.
Anyway, to take the leap forward when I don't want to do it, the following helps me:
1.- I think that the way I feel at that moment is temporary, that everything always passes and that is not the exception, I focus on all the good I have in my life and try to keep my thoughts there. I also think that there are many people in a worse situation and with a better attitude, so I shouldn't let myself get down. All this makes me change the perspective of my situation from colossal to small.
2.- I force myself to get out of bed and then I start listening to happy music, it seems silly, but the right music relieves me, even fills me with energy and gives me back a smile.
3.- I do something constructive, for example, it works for me to clean and tidy the house, because when I finish, I always like the result and it makes me feel good.
4.- I go for a walk outdoors, being in front of the sea is what calms me the most, but now that I don't have it close, I also enjoy the vegetation. The contact with nature revitalizes me, besides, physical exercise makes us secrete hormones that give us the feeling of happiness.
I think that in any case it is important to maintain objectivity, to think that we have nothing to gain by spending more time than necessary resenting something that has no remedy, either because it has already happened or because it is beyond our control.
Time does not stand still and it is limited, it is better to try to be happy as long as we can. Not so much, however, doing what is most reasonable and healthiest will always be the best option.
When we know what is right and what is wrong, at least we can choose with conscience which path to take, regardless of whether we feel like it or not.
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Traducción cortesía de deepl.com
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Translation courtesy of deepl.com
