Con el favor de Dios veremos materializado nuestro sueño de tener una casa propia, eso no es imposible. Mientras hacemos lo que podemos para mejorar el espacio que habitamos día a día, y que quizás tenga muchas faltas, pero que paso a pasito podemos darle amor. Estoy segura que la Navidad llegará renovada con tus manualidades y costura. El resto es un trabajo que poco a poco se irá logrando amiga. Los sueños, son metas también, por eso las esperanzas de alcanzarlos nunca se pierden.🤗🤗🤗💐